Cómo colocar papel pintado: así lo usan los interioristas para transformar tu hogar

El papel pintado renueva cualquier espacio en pocas horas, oculta imperfecciones y da estilo sin esfuerzo

Versátil, fácil de colocar y duradero, es el recurso perfecto para quienes buscan un cambio rápido y con mucho efecto.

El papel pintado es una de esas soluciones mágicas que pueden cambiarlo todo sin necesidad de hacer obras. Con sus infinitos diseños, facilidad de instalación y larga durabilidad, ha pasado de ser un recurso clásico a convertirse en una herramienta imprescindible en decoración. Y lo mejor: cualquiera puede colocarlo en casa y disfrutar de un resultado espectacular.

Por qué elegir papel pintado

El papel pintado es la manera más sencilla de transformar una estancia sin complicaciones ni grandes inversiones. Es económico, fácil de colocar y mucho más accesible que pintar murales o hacer reformas. Además, gracias a la enorme variedad de estilos —desde estampados modernos hasta acabados clásicos o incluso personalizados—, siempre encontrarás uno que encaje con tu hogar.

También cumple una función práctica: ayuda a disimular pequeñas imperfecciones en las paredes, como manchas o grietas, y puede cubrir revestimientos antiguos que ya no te convencen. Es una especie de «borrón y cuenta nueva» decorativo que aporta calidez y personalidad. Eso sí, cuidado… porque engancha. Una vez ves el resultado de tu primer proyecto, es muy probable que quieras empapelar toda la casa.

  • ¿Cuánto se tarda en colocar papel pintado? Entre 2 y 3 horas por pared, dependiendo del tamaño y del diseño.
  • ¿Cuánto dura? De 10 a 15 años, siempre que sea un papel de calidad y se mantenga en buenas condiciones.

Paso a paso para colocar papel pintado

Combinado con un arrimadero, el papel pintado aporta un estilo único y protege tus paredes.

Empapelar una pared no es complicado si sigues el proceso adecuado. Aquí te dejamos los pasos básicos para un acabado profesional:

1. Prepara la pared

    Debe estar seca, limpia y lisa. Si tiene pintura brillante, lija y aplica imprimación; si es mate, basta con limpiarla con una solución suave de bicarbonato. Evita gotelé o superficies con relieves, ya que impedirán un buen acabado.

    2. Calcula los rollos

      Mide la altura de la pared y el perímetro total de la habitación (restando puertas y ventanas). Divide la longitud del rollo (normalmente 10,05 m) entre la altura de la pared para saber cuántas tiras obtendrás. Y recuerda añadir un 10% más si tu papel tiene dibujos que deben casarse.

      3 Mide y corta

        Corta las tiras de papel con unos centímetros extra arriba y abajo para ajustar después. Marca una línea vertical en la pared con un nivel: será tu guía para empezar recto.

        4. Coloca el papel

          Aplica adhesivo en la pared, coloca la primera tira alineándola con la guía y alísala con una espátula de centro hacia fuera para evitar burbujas. Recorta sobrantes y repite con el resto de tiras cuidando que las juntas queden perfectamente alineadas.

          5. Acabado y detalles

            En enchufes, radiadores o ventanas, corta con cuidado para ajustar el papel. Revisa juntas con un rodillo y deja secar unas 4-6 horas sin tocar.

            A la hora de colocar papel pintdo, usa una espátula para alisarlo y eliminar burbujas.

            El papel pintado ya no es solo una moda, es una herramienta práctica, económica y con un gran efecto visual. Ideal para renovar dormitorios, salones, comedores e incluso habitaciones infantiles, donde aporta un plus de color y diversión.

            Con un poco de paciencia y creatividad, puedes transformar cualquier rincón de tu casa en apenas unas horas y disfrutar de un espacio que refleje tu estilo.